La muestra incluye más de 50 obras que muestran su variado trabajo en plástica, gráfica, diseño, dibujo, proyecto muralístico, caja arte objeto, escultura, diseño editorial, así como retratos de escritores y pintores.
La muestra se inaugura este jueves 25 de agosto a las 19 horas en la galería LA MERCANTIL, ubicada en Fernández Leal 107, colonia La Concepción, alcaldía Coyoacán.
Juan Berruecos (Ciudad de México, 1948), ha trabajado durante 55 años como pintor, editor, arquitecto, restaurador de obra, un renacentista de nuestro tiempo y también un creador barroco de obra plástica, gráfica, diseño, dibujo, proyectos murales, caja arte objeto, escultura, diseño editorial y una variada colección de retratos de escritores y pintores.
En esta exposición veremos una diversidad de formatos que incluyen algo de las muestras en las que ha trabado como gráfica, aguafuerte, aguatinta, punta seca, talla dulce, acuarela, batik y gouach, obras figurativas como abstractas. Veremos sus Pleamares, homenaje de la poesía viva de los poetas muertos, de 2016. Además de secciones de sus exposiciones desde 1999 hasta 2019, tanto en Estados Unidos como en Europa.
Berruecos reconoce la influencia que tuvo a partir de largas conversaciones y trabajo conjunto con sus maestros, como Enrique Climent, Luis Nishizawa y José Luis Cuevas, así como arquitectos que fueron excelentes dibujantes, como Mathias Goeritz.
En esta exposición también se podrán ver sus pleamares, trabajados con arenas, polvos de mármol y de caracolas, así como fósiles marinos, para que los cuadros tengan una lisura en la profundidad y en el punto de fuga sin recurrir a ningún referente, como la lejanía, para que sea el último punto del horizonte, técnica que impactó a Carlos Pellicer, quien escribió un poema al respecto.
Cuando estoy frente al mar,/ el tiempo es un ángel que esconde las horas/
y ya no se recuerda lo que se va a olvidar… /“
“Toma la vida la postura/
de un gran camino horizontal,/
donde perderse es llegar siempre/
a esa línea ambulante /
de nuestra bien construida/
soledad./
/ Hermoso mar que viene de tan cerca y nunca acaba de llegar../
En el sonido ,
el son sonoro,
de la sonaja resonante
de su explosiva actividad ..” /
Lo mismo han hechos otros escritores y poetas sobre sus arenas porque el mar es esencial en la obra de este artista “porque nunca es igual, ya que ahí todo intento plástico o gráfico tiene todas las variantes posibles y todos los colores: desde el alba hasta el amanecer, con un gran contraste lumínico, con sus variantes tonales, el infinito y la presencia del ser humano ante la inmensidad”.
La muestra es una invitación a aproximarse a un universo de color y texturas que muy pocos artistas plásticos logran actualmente, a partir de materiales tan diversos como la propia imaginación del autor de esta inquietante retrospectiva.
Juan Berruecos estudió grabado, dibujo y pintura en la Escuela Regional de Bellas Artes de Bordeaux, Francia, y Arquitectura en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM). Trabajó en los talleres de Enrique Climent y Luis Nishizawa. Fue profesor adjunto del maestro Nishizawa en la Escuela Nacional de Artes Plásticas UNAM.
Participó en el cursos y talleres gráficos en Cambridge, Gran Bretaña, y en varios centros gráficos en París y Londres.
Ha realizado obra plástica y ediciones de gráfica experimental, para diversos talleres, y es editor, fundador y director del Centro de Experimentación Gráfica, Taller de Diseño, Libroarte y Arteletra.
Ha sido profesor especial invitado en el Colegio de Artes de California, en San Francisco y Oakland. Miembro de número de la Netherlands Academic Society, de Leiden, Países Bajos; Miembro del Consejo de Arte y Galerías, y Asesor Cultural de la Universidad Autónoma Metropolitana, entre otros.
Ha montado más de 100 exhibiciones individuales y participado en más de un centenar de muestras colectivas. Destaca sus exposiciones en la Cité de París y en Bourdeaux, Francia; en museos y galería de Estados Unidos; en los países escandinavos hasta donde llevó sus “Pleamares: homenaje de la poesía viva a los poetas muertos”, y en el Palacio de Bellas Artes en la muestra: México eterno, arte y permanencia En cuanto a obra monumental, realizó el mural modular El hombre, en el edificio sede del Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores (Infonavit) y el mural en relieves denominado La Comunicación, para el Instituto Mexicano de la Audición y el Lenguaje.
Han publicado dibujos, ilustraciones y pinturas en la serie «Clásicos de la Literatura» (SEP, Fernández Editores y Editorial Trillas). Editó e ilustró con el Instituto Oaxaqueño de las Culturas, los libros de Andrés Henestrosa El retrato de mi madre, prologado por Octavio PAZ (1993) y del mismo autor, Flor y látigo (19995) y Carta a Cibeles (1997).
Su trabajo ha sido incluido en 24 carpetas de gráfica con textos de Carlos Pellicer, Efraín Huerta, Octavio Paz, Andrés Henestrosa, Jaime Sabines, Álvaro Mutis, Antonio Deltoro, Víctor Manuel Mendiola, Jaime Avilés, María. Luisa “La china” Mendoza, Carlos Illescas, Andrés Ruiz, entre otros.