El elemento arquitectónico descubierto no tiene trazos de pintura negra, sino que fue pintada en color rojo. La representación muestra un símbolo en forma de “U”, que podría reproducir una cueva con agua subterránea, como una posible alusión al inframundo, a donde parece entrar una serpiente.
Expertos del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), descubrieron una pintura mural inédita en un bloque de piedra usado por los antiguos mayas como tapa de bóveda, en una de las estructuras de la Acrópolis de Ek’ Balam. Con esta suman ya siete tapas de bóveda pintadas recuperadas en el último año en esta zona arqueológica de Yucatán.
El director general del INAH, Diego Prieto Hernández, detalló que, con el reciente descubrimiento de esta tapa de bóveda, se contabilizan 30 de estos elementos arquitectónicos registrados a lo largo de los años en el sitio, los cuales han proporcionado datos relevantes, como los nombres de algunos de los gobernantes del reino de Talol (Ek’ Balam), así como las fechas en que se construyeron los cuartos del palacio real o Acrópolis. Añadió que el descubrimiento se hizo en el Tramo 4 de la ruta del Tren Maya.
A diferencia de las ya conocidas, la tapa localizada ahora no tiene trazos de pintura negra, sino que fue pintada en color rojo. La representación muestra un símbolo en forma de “U”, que podría reproducir una cueva con agua subterránea, como una posible alusión al inframundo, a donde parece entrar una serpiente. Se ve la cabeza y parte del cuerpo del reptil, el cual podría asociarse con el pie serpentino del dios K’awiil.
El antropólogo explicó que, conforme a lo señalado por los directores del Proyecto Arqueológico Ek’ Balam, Leticia Vargas de la Peña y Víctor Castillo Borges, este hallazgo puede proporcionar información sobre los constructores de los recintos de élite de la Plaza Elevada Este de la Acrópolis, así como la fecha en que fueron erigidos. En este sector del edificio recientemente se hallaron las fachadas de los cuartos decoradas con los relieves estucados de captores y cautivos.
Por lo que toca a las labores de investigación y conservación en Ek’ Balam, que se han puesto en valor estructuras y conjuntos arquitectónicos como el Juego de Pelota, el Patolli, la Estructura 14 y la Acrópolis donde, incluso, se realizaron excavaciones; además de la consolidación de elementos decorativos, como paneles de piedra y estuco. La renovación de la señalética tiene 33 por ciento de avance, y se comenzó la construcción del Catvi.
Ek Balam es un nombre en lengua maya yucateca, formado por los vocablos ek’, con el que se denomina al color negro y que también significa “lucero” o “estrella”; y balam, que quiere decir “jaguar”. Puede traducirse entonces como “jaguar-oscuro-o negro”. Sin embargo, algunos hablantes de maya en la región también lo traducen como “lucero-jaguar”. En la Relación de Ek’ Balam, escrita en 1579, se menciona que el nombre del sitio proviene de un gran señor que se llamaba Ek Balam o Coch Cal Balam, quien lo fundó y gobernó durante 40 años. Sin embargo, la evidencia arqueológica no ha proporcionado alguna prueba de la existencia de dicho personaje.
Ek Balam se localiza a a unos 170 km de Cancún, a 157 km de Playa del Carmen, a 127 km de Tulum, a 27 km de Valladolid Yucatán y a 175 km de Mérida.
Ek´Balam (Estrella Jaguar) es una ciudad maya que tuvo su máximo desarrollo durante el Clásico Tardío / Terminal (600-850 / 900 dC) y que posiblemente fue la sede del reino de «Tlalol». El primer rey conocido de Ek´Balam es Ukit Kan Le´t Tok (el padre de las cuatro fachadas de pedernal) quien fue el constructor de la mayor parte del suntuoso palacio que ahora conocemos como la Acrópolis y muchas otras obras. Asimismo, fue un impulsor de los avances técnicos y culturales, así como de la riqueza arquitectónica y decorativa, cuyo mejor ejemplo es la Estructura 35 Sub, ubicada dentro de la Acrópolis y conocida como Sak Xok Nahh (casa blanca de la lectura), que sirvió como una tumba para Ukit Kan Le´t Tok, quien fue enterrado con una rica ofrenda compuesta por más de 7.000 piezas como vasijas de cerámica, objetos de concha, caracol y tumbaga.
El titular del INAH destacó que la implementación del Programa de Mejoramiento en Zonas Arqueológicas (Promeza), en 27 sitios del sureste y de la península de Yucatán, los cuales verán incrementada la afluencia de visitantes por la operación del Tren Maya, ha dado lugar a importantes descubrimientos, como el descrito.
Añadió, el Programa de Mejoramiento de Zonas Arqueológicas, denominado Promeza,ha permitido concretar diversos proyectos en la Zona Arqueológica de Chichén Itzá, el más reciente, la apertura pública de la sección Chichén Viejo o Serie Inicial.
Las tareas de investigación y conservación en Chichén Itzá, a los que resta 14por ciento para concluir, se han enfocado en importantes estructuras, como el Gran Juego de Pelota, el Templo de los Guerreros, el Anexo de las Monjas, la Casa de los Caracoles y de la Luna, y el Grupo de las Monjas; mientras que la señalética se ha renovado totalmente.
En cuanto a infraestructura, Prieto Hernández informó que la construcción del Centro de Atención a Visitantes (Catvi) y del museo de sitio tiene más de 30 por ciento de avance, progreso que constató el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, durante su inspección más reciente a la obra del Tren Maya. En lo que será el nuevo museo, el mandatario pudo admirar medio centenar de piezas recuperadas en el salvamento arqueológico correspondiente al Tramo 4.
El director general del INAH hizo hincapié en el diálogo que mantiene la institución con las y los comerciantes de la Zona Arqueológica de Chichén Itzá, para facilitar la reubicación de sus espacios de venta, coadyuvando así al ordenamiento del sitio y a mejorar las condiciones de las comunidades cercanas.
Diego Prieto Hernández concluyó que, al corte del 11 de septiembre de 2023, en el Tramo 4 del Tren Maya, cuyos derechos de vía están liberados para el avance de la obra, se han registrado e investigado 4,228 bienes inmuebles, correspondientes a cimientos, albarradas y basamentos prehispánicos; 570 bienes muebles, principalmente objetos cerámicos, y 42,617 tiestos. A estos se añaden 16 entierros humanos y 145 rasgos naturales asociados a asentamientos humanos.
El hallazgo fue dado a conocer en la conferencia de prensa matutina de la Presidencia de México, donde se presentaron los avances de obra del Tramo 4 del Tren Maya, el cual recorrerá 239 kilómetros entre las estaciones Izamal, en Yucatán, y Cancún Aeropuerto, en Quintana Roo.